Campañas publicitarias como “sin condón ni pio” o “condón pilo” fueron y son adelantadas por la secretaria de salud de la mano con el ministerio de protección social, dándole una herramienta a los medios para crear “responsabilidad social” de un problema de salud publica en nuestro país.
Para algunos que vivieron a finales del siglo XX, específicamente en los años 90´s, no era extraño ver en televisión la pollita que repetidas veces le decía al pollito “sin condón ni pio”, pero muchas veces fue criticada porque para un país tan conservador y con una cultura religiosa fuerte que consideraba tabú el tema de las relaciones sexuales, como Colombia, “liberar” el sexo y mostrarlo repetidas veces en la programación televisiva podría dar pie a que los jóvenes tomaran las relaciones sexuales como una práctica constante, que gracias a los métodos de planificación los podía librar de cualquier responsabilidad.
Un factor poco usual del sexo que ha venido en aumento, es la promiscuidad, hecho que nos demuestra que el “liberar” el sexo creando métodos de planificación, ha llevado a que los jóvenes propaguen las relaciones sexuales como una práctica que no solo se lleva a cabo con la pareja estable, sino que también con distintas personas, en distintos lugares y en distintas circunstancias.
Hace algunos años, no más de dos o tres, salió una campaña publicitaria que cubría principalmente colegios y universidades del país; “condón pilo” estuvo en manos de muchos adolescentes y propiciaba el uso del condón, único método anticonceptivo que además de prevenir embarazos y tener el 99.5% de efectividad, evita el contagio de infecciones de transmisión sexual.
Pero, ¿Qué pasa cuando dejamos de lado las iniciativas de las instituciones y entramos en la mente del adolescente que ve esta clase de campañas publicitarias? ¿Será que funcionan en ellos y los incita a utilizar estos métodos? Realmente parece poco útil la información dada acerca de la planificación familiar, pues el aumento de jóvenes con problemas causados por no utilizar métodos anticonceptivos, es constante; aun existen mitos como que con condón “no se siente igual”, pero en la actualidad existen variedad de condones que ayudan a la estimulación sexual y que proporcionan placer y seguridad en un solo método.
Es claro que las campañas no proporcionan la suficiente información, aunque incitan a utilizar, principalmente el condón, no explican de manera clara los beneficios que proporcionan los métodos de planificación, sino que simplemente dicen algo como “tomen aquí están, tengan todo el sexo que quieran, pero utilícenlos”. No hay resultados notables en la recepción de esta información y esto hace pensar que hay fallas lamentables en la creación de mecanismos que colaboren en que los adolescentes valoren y respeten su cuerpo.
Hoy en día la sexualidad ya no es un mito, es por eso que hay que conocer los intereses del adolescente para saber cómo llegar a que ellos planifiquen y para que los índices de promiscuidad bajen. Hay que escucharlos y hay que hablar con ellos; simplemente se necesita reforzar el fin de las campañas publicitarias con las que los medios y las entidades oficiales encargadas de la salud de los colombianos, buscan reforzar la salud sexual de todos.
Escrito por: Eliana Garzón