MUNDO DE FANTASIA…

Muñecas, ropa, amigos, colegios hermosos en general mi niñez se caracterizo por tener todo y más de lo que cualquier niña desearía. Mi padre un hombre complaciente que era feliz haciendo los deseos de sus dos hijas realidad nos acompañaba cuando podía pues sus negocios eran los que sostenían nuestro hogar. Por otro lado mi madre en su esfuerzo por ser mejor cada día dejo a un lado algo muy importante para mi hermana mayor y para mí su compañía, claro que de esto nos vinimos a dar cuenta cuando habían muchas cosas que no se podían remediar.
Poco a poco fuimos creciendo, podría decirse que felices pues para nosotras dicha felicidad estaba compuesta por cosas materiales y pasajeras. Pero los años también llegaron con mucha tristeza y dolor a nuestro hogar. De manera repentina mi padre dejo de amar a mi mama, sin explicación alguna, no compartía con ella, sus decisiones se tomaban individualmente, pero bueno nosotras éramos felices y no notábamos la profunda tristeza que inundaba el corazón de mi mama.
A nuestra corta edad, contábamos con un grupo de amigos bastante amplio éramos el centro de atención de muchas personas así que nada podía ser mejor. Mi hermana a sus 12 años ya tenía novio aunque era un muchacho muy mayor y un poco desagradable, y yo tenía mucho dinero el cual invertía en ropa salidas con amigos y de vez en cuando eso sí, sin que nadie de mi familia lo notara iba a fiestas donde el ambiente era indescriptible.
Como la mayor parte del tiempo nuestra casa permanecía sola mi hermana llevaba amigos y aunque yo creía que tenía un solo novio muchos hombres cumplían este papel, se emborrachaban y fumaban cosas que olían muy mal pero yo no notaba que algo malo sucedía.
Un día conocí a uno de sus amigos y me pareció el hombre más lindo que había visto y aparte de eso muy especial pues cuando hablaba conmigo me hacia sentir como una reina, sin autorización de ella empezamos a salir. Yo ya no llegaba a casa en la ruta pues él me recogía en uno de los tantos carros que su papa le prestaba.
Cuando cumplí 13 años me di cuenta que ya no era una niña así que quería conocer cosas nuevas al lado de esta persona que para mí era irremplazable, por esto le pedí que yo quería perder mi virginidad a su lado. Su reacción fue de total asombro pues aunque me trataba muy bien cada vez que podía me recalcaba que yo era una niña que no quería madurar, me dijo que lo pensara que no me obligaba a nada, pero no mucho después acepto mi propuesta.
Una noche inolvidable siempre soñé para el día que fuera tener mi primera relación sexual, pero esta vez mi sueño no se cumplió, la pase rico tuve sexo mucho sexo durante toda la noche, pero cuando amaneció el placer termino. Como era de esperase al poco tiempo deje de saber de él pero bueno no me importo pues desde la primera vez que estuve con él, el sexo se convirtió en mi mayor pasión así que cada vez que tenia oportunidad con cualquier hombre lo hacía para satisfacerme.
Las relaciones con mis padres eran las peores, ya no era la niña tierna y consentida, me convertí en un fuerte y duradero dolor de cabeza, así que su opinión era lo que menos me importaba, salía y llegaba a la hora que quería, es mas mi casa dejo de ser mi casa pues solo iba cuando el dinero se acababa o tenía ganas de comer o cosas por el estilo en fin lo que le pasa a una adolescente tonta que cree que tiene el mundo a sus pies.
Un día cuando fui a pedirle dinero a mi padre me di cuenta que estábamos en la ruina todo lo que teníamos nuestros carros las acciones en el club las tarjetas de crédito todo había desaparecido mi padre hizo un mal negocio y el sueño mi sueño termino, así que lo trate mal como si fuera mi trapo del piso pues yo creía que su responsabilidad era mantener bien a sus princesitas.
La vida seguía y mi vida de lujos no podía terminar le conté a mis amigos más cercanos lo que sucedió pidiéndoles es mas casi suplicándoles que nadie se podía enterar de mi nuevo estatus social, pero que va; todo el mundo se entero y me dejaron sola, para mí esto no fue problema porque me creía capaz de todo, empecé a trabajar con un muchacho que vivía en nuestro nuevo barrio ganaba muy bien y hacia poco, hacer feliz a otros y a mí con sustancias psicoactivas como marihuana, éxtasis, perico, me daban para empezar de nuevo.
Pero bueno la vida mejoro pues conocí a un niño mayor que yo dos años estudiaba no tenia malos vicios, y me ayudo para dejar muchas cosas malas que aprendí durante un tiempo. 6 meses y no habíamos tenido nuestra primera relación así que me pareció que no me quería solo para acostarse conmigo y ya.
Pero mi primera vez con él fue como un sueño me sentí amada respetada y valorada, me di cuenta que una mujer valía no por el número de veces que pasara por la cama de un hombre si no por las veces que se sintiera amada. Después de esto el amor se fortaleció más y más. Pero el día que me tenía que llegar mi periodo empezó un gran dilema para mí, no quería algo inesperado como una enfermedad o en el peor de los casos un hijo, había pasado por tantas cosas pero esto, esto me dejo sin ganas de nada.
Empecé a cuestionarme sobre muchas cosas, el costo que sería tener un hijo, si mis padres me darían su apoyo después de todo el mal que les hice, en como iba terminar el colegio, en si algún día podría hacer una carrera universitaria, eso y mil cosas más que nadie se alcanza a imaginar. Pero bueno aunque tarde aprendí a valorar mi cuerpo pero sobretodo la vida así que sin pensar en nada ni nadie, sabía que lo más correcto era tener mi bebe.
Valentina ya tiene 9 meses y es lo que más amo en la vida, cuando la pude ver por primera vez supe que la vida para mi empezaba en ese momento, aunque el proceso de aceptación de mi familia fue difícil esta niña preciosa unió una familia que hace mucho tiempo estaba destruida.
Del papa de mi angelito no les puedo contar mayor cosa termino nuestra relación no por él, por mi no quería que se sintiera atado por nuestra hija además si de dios esta que seamos pareja, en un futuro quizá no muy lejano volvamos a estar juntos eso si con la mejor y mayor compañía del mundo valentina.
Yo estoy trabajando y mi papa el abuelo de vale se convirtió como en su papa la cuida día y noche y aunque no tiene todos los lujos que yo tuve, lo que tiene es fruto de mi esfuerzo y dedicación.

Por: Jennifer Barragán López.